Dinastia Romanov brevemente
Los Romanov
Los Romanov son un clan de boyardos rusos, que comenzó su existencia en el siglo XVI y dio origen a la gran dinastía de los zares y emperadores rusos, que gobernaron hasta 1917.
Por primera vez, el nombre "Romanov" fue utilizado por Fedor Nikitich (Patriarca Filaret), quien se nombró a sí mismo en honor de su abuelo Roman Yurievich y padre de Nikita Romanovich Zakharyev, se le considera el primer Romanov.
El primer representante zarista de la dinastía es Mikhail Fedorovich Romanov, el último es Nikolai 2 Alexandrovich Romanov.
En 1856, el escudo de armas del clan Romanov fue aprobado, representa a un buitre sosteniendo una espada dorada y un tarch, y ocho cabezas de león cortadas en los bordes.
"Casa de los Romanov" - designación de la totalidad de todos los descendientes de diferentes ramas de los Romanov.
Desde 1761, los descendientes de los Romanov reinaron en Rusia a lo largo de la línea femenina, y con la muerte de Nicolás 2 y su familia, no había herederos directos que pudieran reclamar el trono. Sin embargo, a pesar de esto, hoy docenas de descendientes de la familia imperial, de diversos grados de parentesco, viven en todo el mundo, y todos ellos pertenecen oficialmente a la familia Romanov. El árbol genealógico de los Romanov modernos es muy extenso y tiene muchas ramas.
Antecedentes de la regla de los Romanov
No hay consenso sobre el origen de la familia Romanov. Hasta la fecha, dos versiones están muy extendidas: según uno de los antepasados romanov llegaron a Rusia desde Prusia, y según otro, desde Novgorod.
En el siglo XVI, el clan Romanov se hizo cercano al rey y pudo reclamar el trono. Sucedió porque que Iván el Terrible se casó con Anastasia Romanovna Zakharyina, y toda su familia se convirtió en pariente del soberano. Después de la supresión del clan Rurikovich, los Romanov (ex Zakharyevs) se convirtieron en los principales contendientes para el trono estatal.
En 1613, uno de los representantes de los Romanov fue elegido para el reino: Mikhail Fedorovich, que sirvió como el comienzo de un largo reinado de la dinastía Romanov en Rusia.
Los reyes de la dinastía Romanov.
- Mikhail Fedorovich;
- Alexey Mikhailovich;
- Fedor Alekseevich;
- Ivan V;
- Pedro I.
En 1721, Rusia se convirtió en el Imperio, y todos sus gobernantes se convirtieron en emperadores.
Emperadores de la dinastía Romanov
- Pedro I;
- Catalina I;
- Pedro II;
- Anna Ioannovna;
- Ivan VI;
- Elizabeth
- Pedro III;
- Catalina II;
- Pablo I;
- Alejandro I;
- Nicolas I;
- Alejandro II;
- Alejandro III;
- Nicolas II.
El fin de la dinastía Romanov y el último Romanov.
A pesar del hecho de que había emperatrices en Rusia, Pablo 1 adoptó un decreto según el cual el trono ruso solo podía transferirse a un niño, un descendiente directo del clan. Desde ese momento hasta el final de la dinastía en Rusia, los hombres gobernaron exclusivamente.
El último emperador fue Nicolás 2. Durante su reinado, la situación política en Rusia se puso muy tensa. La guerra japonesa, así como la Primera Guerra Mundial socavaron en gran medida la fe del pueblo en el soberano. Como resultado, en 1905, después de la revolución, Nikolai firmó un manifiesto que otorgaba al pueblo amplios derechos civiles, pero esto tampoco ayudó mucho. En 1917, estalló una nueva revolución, como resultado de lo cual el rey fue derrocado. En la noche del 16 al 17 de julio de 1917, dispararon contra toda la familia real, incluidos los cinco hijos de Nikolai. Otros parientes de Nikolai que estaban en la residencia real en Tsarskoye Selo y otros lugares también fueron atrapados y asesinados. Solo los que estaban en el extranjero sobrevivieron.
El trono ruso se quedó sin un heredero directo, y el sistema político en el país cambió: la monarquía fue derrocada, el Imperio fue destruido.
Los resultados del reinado de Romanov
Durante el reinado de la dinastía Romanov, Rusia alcanzó su apogeo. Rusia finalmente dejó de ser un estado fragmentado, la lucha civil terminó y el país gradualmente comenzó a ganar poder militar y económico, lo que le permitió defender su propia independencia y enfrentar a los invasores.
A pesar de las dificultades que ocurrían periódicamente en la historia de Rusia, en el siglo XIX el país se había convertido en un gran Imperio poderoso, que poseía vastos territorios. En 1861, la servidumbre fue completamente abolida, el país cambió a un nuevo tipo de economía y economía.